En una impactante y controvertida escena, Thom Yorke, líder de Radiohead y cantante de The Smile, tomó una decisión inesperada durante un concierto en Melbourne, Australia. Un miembro del público, partidario de Palestina, desafió a Yorke sobre la situación en Israel y Gaza, lo que llevó al artista a detener brevemente la presentación. Ante la provocación, Yorke no se quedó callado y desafió al manifestante a subir al escenario y expresarse directamente. Tras abandonar momentáneamente el escenario, el músico regresó para interpretar el clásico “Karma Police” de Radiohead.
Este incidente revive las críticas que Yorke y Radiohead han enfrentado en el pasado por presentarse en Israel, desatando un intenso debate sobre la responsabilidad de los artistas en medio de conflictos políticos. La polémica se extiende a Jonny Greenwood, compañero de banda de Yorke, quien ha defendido su colaboración con el músico israelí Dudu Tassa, generando un nuevo enfrentamiento con el movimiento Pro-Palestina BDS.
En medio de una atmósfera cargada de tensión y pasiones encontradas, la música se convierte una vez más en terreno de confrontación y reflexión sobre el rol de los artistas en el escenario político global.